La segunda ciudad de Holanda en población, pero igual no demasiado grande. Como todo en Holanda. Pero desde un punto de vista arquitectónico, es Disneylandia, con edificios increíbles construidos recientemente. Acá comparto algunas fotos que tomé.
Para agrandar las imágenes hacé click en ellas.
- En la segunda guerra mundial los nazis bombardearon completamente el centro de la ciudad y lo destruyeron para luego ocuparía. Hay monumentos dedicados a esta época de la ciudad, como esta estatua de una mujer gritando al cielo, que es una personificación de la ciudad durante el bombardeo aéreo de los nazis. Por la perspectiva no se aprecia bien, pero en el pecho tiene un agujero como metáfora del corazón ausente (porque se lo quitó la guerra, y también porque la ciudad vio desaparecer su centro de un momento para el otro).
- Los monumentos que recuerdan el momento en que la ciudad fue destruída por los bombardeos nazis están por todos lados, como este que recuerda a una iglesia que desapareció junto a un trabajador que estaba cruzando la calle.
- Este edificio, la Casa Blanca de Rotterdam (Wite Huis), fue uno de los pocos que sobrevivió al bombardeo. En 1898, año de su inauguración, fue el rascacielo más alto de Europa. Hoy, pierde por petiso.
- La estación central es lo primero que uno ve todo el que llega a la ciudad y no lo hace en auto. Un edificio moderno y que llama la atención con su techo plateado y quebrado.
- El edificio que se roba toda la atención por lejos. Tiene forma de ver U invertida. En la parte de adentro tienes un mural gigante, que es en la zona donde se encuentra el mercado, y la parte de las U propiamente dicha es zona residencial, con gente viviendo en lo que sería las paredes/techos del mercado.
- El techo interior del Markthal tiene una colorida obra de arte de Arno Coenenque impacta por su tamaño
- En Rotterdam el cielo se ve en todos lados, porque el cristal de los edificios lo refleja permanentemente.
- La fruta a precios populares en el mercado central.
- La comida curiosa tampoco falta en el mercado central, como este hongo con hongos. No entendí muy bien.
- Uno de lo platos típicos callejeros de Holanda (por no decir el único) es una especie de pescado crudo. De todos modos me parece que la elección de la foto para el cartel no fue la mejor, porque el niño ese va a morir atragantado.
- En el mercado central hay todo tipo de comida típica, y las vacas no se salvan.
- Otro de los edificios icónicos de la ciudad es el lápiz, que se puede ver desde dentro del Mercado central por una de sus paredes de cristal.
- Es un complejo de viviendas que tiene forman forma de cubos torcidos, y pintados con un amarillo cremita que no las favorece.
- Se puede entrar al complejo de viviendas, y de la casas hay una que es de muestra y por 3€ se puede visitar por adentro.
- Las formas geométricas de las casas forman sombras y reflejos que lo sitúan a uno en una especie de pasadizo.
- Los yuyos crecen entre las casas cubo. Nunca se sabe en el primer mundo si les pasa por desprolijos o está todo friamente calculado.
- Los edificios de cristal tienen diferentes formas y colores, y compiten por ver cuál es el más alto, vidriado y minimalista de la ciudad.
- Los pedazos de cielo están por todos lados reflejados en las paredes vidriadas de los edificios.
- Los parques son muy particulares, con juegos que usan una falsa perspectiva para crear la sensación de objetos tridimensionales que en realidad no son otra cosa que rejillas para trepar.
- Frente al ayuntamiento de la ciudad comienza una zona peatonal donde se encuentran las grandes tiendas.
- En la ciudad hay un edificio llamado «Montevideo», y como dice el Pelado Martínez: «moof for good».
- Delfshaven fue alguna vez la salida al mar de una de las ciudades cercanas a Rotterdam. Pero en realidad están tan cerca que hoy ese puerto es un barrio de la ciudad de Rotterdam propiamente dicha.
- Los patos también disfrutan el verano, si es que es un pato.
- La bici es el transporte típico holandés. Y casi todas las bicis de ahí tienen el típico timbre con la corona.
- Llamado Erasmus no por los jóvenes que van a enfiestarse al extranjero diciendo que van a estudiar sino por el filósofo que nació en esta ciudad holandesa. El puente tiene forma de cisne y conecta la parte sur con la parte norte de la ciudad.